
Tras la lesión del escolta Martín Pascal durante la primera burbuja de la Liga Argentina de Básquetbol, Tomás de Rocamora salió nuevamente al mercado para incorporar otra ficha mayor de manera provisoria y este martes sumó al interno Horacio Rigada, quien ya vistió los colores del club en otras oportunidades. “Lo tomo como un pequeño desafío y un sueño”, afirmó el jugador.
Rigada, quien este martes ya se entrenó con el plantel en el balneario Itapé, formó parte del equipo que en mayo de 2011 logró el ascenso al TNA. En la ciudad también jugó para Regatas Uruguay (11-12) y a continuación en Zaninetti (12-13). Luego emigró a Santa Fe para jugar cuatro años en Sportivo Suardi, más tarde recaló en Atlético Sastre y recientemente en Racing de San Cristóbal.
“Lo tomo como un pequeño desafío y un sueño, es algo que me había quedado pendiente después de haber jugado las otras categorías con el club. Aunque sea un año atípico trataré de dar lo mejor y estar a la altura del torneo”, manifestó el jugador de 31 años y 1.90 de altura.
Va a ser raro el primer partido, en este contexto de burbuja en pandemia. No sé cuánta gente pueda ir a ver los partidos o no. Mi último partido en el club fue cuando ascendimos al TNA y la cancha explotaba por todos lados; fue algo hermoso…”, señaló finalmente y en relación a cómo imaginaba su primer encuentro.