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Temperley de Rosario tuvo el mejor debut en la Liga Provincial al vencer de visita a Club Sportivo Suardi por 80-70. El conjunto rosarino jugó un duelo inteligente, con actores preponderantes que supieron hacer la lectura correcta y aprovechar así los muchos errores que cometió un desdibujado Sportivo Suardi que nunca logró hallar un patrón de juego sostenido a lo largo de la batalla deportiva.
Errático primer cuarto tuvo Sportivo, con bajísimo goleo y si bien no estuvo del todo contundente, a Temperley le alcanzó para tomar el liderazgo que jamas abandonaría hasta el final mismo del juego.
Desde muy temprano, jugadores tales como Franco Giachetti, Joaquin Seta o Juan DellaRosa fueron las caras visibles de un volumen claro, con ideas concretas, mas allá de los altibajos propios de cada rendimiento colectivo. Hugo Lopez (7 pts) fue certero en lo suyo en el juego interior mientras que DellaRosa lastimaba con su buen tiro externo.
En tanto, en Sportivo todo comenzó demasiado enredado. Abusó mucho de la individualidad y no respetó libreto alguno, sumado a su escasa efectividad. A 3’ el final, el local solo había convertido 3 puntos cuando se imponía la visita (13-3). Con muchas perdidas y varias malas decisiones, el primer segmento prácticamente fue un calvario para los de Andrés Poi. El 21-9 del inicial de los rosarinos habla a las claras de las diferencias entre unos y otros, es mas; de estar un poco mas fino, otra hubiese sido la ventaja de Temperley.
En el segundo arrancó no tan sólido el visitante y en Sportivo el ingreso de Nicolás Godone fue altamente positivo porque le otorgó rapidez, dinamismo y fuerte presión en la salida. El “Tucho” aportó 8 puntos en el cuarto y tuvo pasajes de elevado protagonismo.
A pesar de mantener Temperley la diferencia en los primeros minutos, con mucho trabajo CSS se ubicó a 5 puntos por debajo. De todos modos, la reacción de los rosarinos no se hizo esperar y en un par de buenas acciones, otra vez recobró la brecha que oscilaba en los 10 puntos.
Pero fue por mas. 17 largos puntos fueron los que terminó sacando Temperley como máxima del juego, dejando en evidencia los marcados errores defensivos del equipo local.
No obstante y teniendo en cuenta ese contexto, Sportivo limó la brecha y maquilló el resultado de cara al descanso largo. Si bien seguía lejos, el 34-47 le daba otro panorama y allanaba las esperanzas de los locales para la segunda mitad del duelo.
El tercer cuarto mostró la solidez de Temperley como para mantenerse arriba en el marcador. Muy pocas veces Sportivo pudo ingresar en la discusión de un mejor tanteador, tirándole la presión al rival. CSS fue un equipo con demasiada ansiedad y queriendo hacer todo a la misma vez, deslucido, sin reacción. Esteban Ledesma desarrolló un buen trabajo, mientras que Pedro Ludolini, secundado por los aportes de la banca de Cristian Yanevich y Lucas de los Santos fueron importantes para no ceder ante las presiones que ejercía su rival, quizá con desorden y mas corazón que basquetbol.
Sin embargo, hay que decir que lo que parecía un score cómodo para los de Marcelo Roig, otra vez Sportivo limó algunos puntos decorando mejor el final del tercer episodio.
En el ultimo acto, comenzó mejor el local e intentó acercarse rápidamente, pero imprevistamente sobrevino un largo parate por una falla en el reloj de 24″ que motivó la búsqueda del par alternativo. Faltaban 8’ 33” y cuando Temperley se imponía 59-52, se produjo este mencionado evento. Luego de muchos minutos sin acción, los directivos de Sportivo arreglaron el problema y se pudo continuar con el enfrentamiento.
La incógnita era saber como les iba a afectar los minutos sin juego y mas teniendo en cuenta que el local pretendía llevar adelante una respuesta ordenada.
Así fue que Temperley rápidamente tomó de nuevo las riendas del partido y volvió a escaparse.
A 6’, ganaba Temperley 54-64. La máxima llegó a ser de 15 puntos y el momento de mas desconcierto de Sportivo fue el que coincidió con una falta antideportiva y la posterior falta técnica al capitán Leonardo Gandolfo por protestar, cuestiones que sumieron a Sportivo en muchas penumbras. Apresurado, con el pasar de los minutos el juego se fue tornando menos ordenado y creció la desesperación con recuperarse, mas teniendo en cuenta que Temperley no amilanaba su poderío.
A casi 4’ para el final, ganaba Temperley 73-61. Ludolini y Seta fueron fundamentales para meter esas asistencias profundas, claras, dolorosas para el contrincante o bien con sapiencia en la conducción para elaborar la mejor ofensiva posible.
Ingresando al minuto final, el margen era de 15 puntos y el equipo de Rosario fue cerrando la persiana ante la inevitable victoria. Enfrente, un Sportivo lleno de dudas y lejos de lo que se pretende para esta nueva temporada según los dichos de su entrenador.
Gran figura DellaRossa, dueño de una mano formidable, fue uno de los hombres clave para quedarse con este triunfo en tierras lejanas.
Síntesis:
Sportivo Suardi (70): Aguirre 7, Gandolfo 5, Riquelme 13, Grosso 8, Ledesma 12 (fi) Godone 8, Cuberli 11, Buraschi 3, Rigada 3, Braida, Pinetti, Fino. DT A. Poi.
libres 17-25 triples 5-19
Temperley Rosario (80): DellaRossa 21, Seta 7, Giachetti 11, Lopez 11, Ludolini 14 (fi) De Los Santos 7, Derevianij 1, Estevez 0, Fernàndez 0, Lussenhoff 0, Roig 0, Yanevich 8. DT M. Roig
Libres 16-26 triples 10-25
Parciales: 9-21/ 34-47/ 50-59 y 70-80.
