En su debut como local y por la tercera fecha del Torneo Apertura, el «aurinegro» superó a Unión y Juventud 83-78.
Ambos presentaron con bajas sensibles y por el lado del elenco santiagueño, el lógico cansancio que genera la doble competencia.
El juego fue intenso, por varios pasajes bien jugado, atractivo y cambiante en las estadísticas. El «Tricolor» ganó el primer segmento 26-20, a partir de un andar más coordinado y aprovechando la supremacía cerca de los acrílicos.
Central fue recuperándose desde la conducción de Contreras y las anotaciones perimetrales de Marino. Por ello, logró revertir la ecuación numérica y cerró el primer tiempo un doble por encima de su rival (42-40).
Las características del partido y el desarrollo no variaron demasiado en lo que siguió. Ledesma y Mantovani, con buen goleo ambos, le dieron esperanzas a los dirigidos por Aispurúa. Desde el lado «aurinegro» sostuvieron las ganas, la actitud, el esfuerzo y cada uno aportó desde su lugar.
Manuel Fernández y ante la falta de un pivote natural, asumió el rol de interno, para disimular una zona vulnerable.
Colectivamente fue creyendo en sus posibilidades y también cerró con ventaja de cuatro puntos el tercer segmento (60-56). Lo sostuvo en los diez minutos finales y se regaló una muy buena primera victoria en el campeonato.
Fuente: Adrián Tavella